Las personas artesanas indígenas reclaman la forma en la que fueron asignados los espacios en este inmueble, adecuado por el gobierno de Luis Nava, y acusan que favorecieron a comerciantes “mestizos”.
El subsecretario de Gobierno del Municipio de Querétaro, Juan Carlos Arreguín Baltazar, les aseguró que sus espacios estaban “garantizados”.
Iván Aldama Garnica
Querétaro, Qro.- Mientras funcionarios del gobierno del municipio de Querétaro llevaban a cabo el acto protocolario de inauguración del “Mercado Artesanal”, comerciantes indígenas protestaban afuera del recinto, que estaba con las puertas cerradas.
Exigen la realización de un segundo sorteo para la asignación de los 200 espacios en los que puedan ofrecen sus artesanías y productos.
“Hicieron un sorteo a modo”, acusó un hombre que sostenía una pancarta en la calle Ignacio Allende, del Centro Histórico de la ciudad capital, afuera del inmueble donde también está ubicado el “Cedai” (“Centro de Desarrollo Artesanal Indígena”).
Las personas artesanas indígenas señalan que este edificio fue adecuado para favorecer a comerciantes “mestizos”.
“Hubo un notario de la Notaría 47 que dio fe y legalidad a un sorteo que no estuvo la gente presente, nada más el representante de unas organizaciones, que son mestizos y los indígenas los dejaron afuera, cuando para ellos se hizo el mercado”, insistía el hombre que protestaba.
Concertadores del gobierno del municipio de Querétaro dialogaban con las personas manifestantes.
No obstante, cuando vieron que habían abierto la puerta, las artesanas intentaron ingresar pero les fue impedido el paso.
Hubo empujones, pero parecía que la situación se calmaría con el diálogo.
No obstante, algunas de las mujeres que protestaban jalaron de la ropa a algunos de los concertadores municipales y uno de ellos terminó sin camisa.
“¿Pa’ qué agredes?, ¿pa’ qué los agredes?”, le reclamó uno de los comerciantes.
Posteriormente el subsecretario de Gobierno del Municipio de Querétaro, Juan Carlos Arreguín Baltazar, les aseguró que sus espacios, estaban “garantizados”.
“Sigue garantizado el espacio para los setenta y tres artesanos de ustedes, que pueden por supuesto participar, acceder, han sido reservados setenta y tres espacios para que ustedes los puedan utilizar y que puedan disfrutar de beneficios de este mercado artesanal”.
No obstante, al subsecretario le reclamaron que no estaban de acuerdo con la forma en la que se había realizado el sorteo y lo acusaron de romper acuerdos.
“No es obligación participar en este proyecto artesanal”, les replicó Arreguín Baltazar.
El funcionario los invitó a una reunión con su jefe, el secretario de Gobierno, Martín Arango García, y luego se fue.
“No cumplen lo que dice, lo que firma”, soltó una comerciante.
“¡No saben trabajar!”, le contestó el funcionario municipal.
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