El mandatario mexicano recomienda a sus opositores hacer una autocrítica y a los medios de comunicación hacer una revisión de su comportamiento.
Al exponer que no promoverá que les quiten las concesiones, a los dueños de los medios también sugirió: “busquen los equilibrios, informen con objetividad, con profesionalismo, tengan realmente como propósito informarle al pueblo”.

Iván Aldama Garnica
Para el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, los resultados de las elecciones del domingo pasado en el país, que favorecen a Claudia Sheinbaum Pardo y en general al Partido Morena, significan una sacudida positiva.
Aunque en sus conferencias mañaneras de esta semana, el mandatario se había referido a los resultados de las elecciones, este miércoles expresó que lo ocurrido el domingo pasado era necesario.
“Esto fue una sacudida (…) mejor digo, para los del norte, para el habla norteña, fue una zarandeada y para el habla de mi tierra, fue una zamarreada que hacía falta”.
López Obrador celebró los resultados al exponer que había mucho desprecio hacia al pueblo: “estaba muy arraigado el clasismo y el racismo”.
El mandatario mexicano sugirió a sus opositores hacer una autocrítica, rectificar y que en el futuro, al menos, le tengan respeto al pueblo, porque es necesaria una oposición fuerte, seria y responsable.
“Se requiere que exista competencia, la democracia es pluralidad, tiene que haber oposición, no es el dominio de una sola organización, no debe de haber pensamiento único, eso tiene que ver más con la dictadura, con el totalitarismo, la democracia es competencia (…) la democracia ayuda mucho a que no haya corrupción, hay una máxima de que ‘el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente’”.
En este proceso electoral, lo que ha ocurrido, expuso el presidente, es que la oposición no planteó un proyecto a la gente, sino que se dedicó a atacarlo.
“Reportajes con periodistas famosos del extranjero, la cadena esa, en redes sociales, de ‘narcopresidente’, sin una prueba de nada, un libro, casualmente, quince días antes de las elecciones sin una sola prueba y guerra sucia en todos los medios, con honrosas excepciones”.
En este sentido, el mandatario opinó que los medios de comunicación, en particular los masivos, deberían hacer una revisión de su comportamiento.
“Ya sabemos que los medios están en manos de potentados, los medios más influyentes no están en manos de comunicadores, de periodistas, están en manos de grandes empresarios y algunos connotados traficantes de influencia, bueno, está bien, no hay que quitarles las concesiones, porque no son de su propiedad, son concesiones públicas, por eso no hay que hacerlo”.
No obstante, consideró que debe procurarse un equilibrio en los medios de comunicación porque “todo está ladeado”.
Aunque expuso que no promoverá que les quiten las concesiones a los dueños de los medios de comunicación masivos, les sugirió que coloquen a la gente por encima de intereses políticos o económicos.
“Para los empresarios, pues una recomendación respetuosa: busquen los equilibrios, informen con objetividad, con profesionalismo, tengan realmente como propósito informarle al pueblo, estén lo más cercano que se pueda al pueblo y lo más distante que se pueda del poder, económico y político”.
“¿Qué, no se puede hacer una reforma a la manera en que se manejan actualmente los medios?”, añadió el mandatario en su conferencia matutina de prensa.
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