Estudiantes de la Universidad Autónoma de Querétaro participaron en un estudio que arrojó, entre otros datos, que el 29.3 por ciento tarda de 2 a 3 horas en realizar sus traslados a bordo de unidades del transporte público colectivo.
El director de la Agencia de Movilidad explicó que uno de los factores que ha impactado al sistema es la obra de “Paseo 5 de Febrero”, pero prevé que la conclusión de la obra se empate con las acciones que están implementando para “generar mayor movilidad”. También reconoció que no han podido recuperar la cantidad de personas usuarias del transporte público colectivo que había antes de la pandemia.
Iván Aldama Garnica
Querétaro, Qro.- Los resultados de una encuesta revelaron, entre otras cosas, que el sistema de transporte público colectivo en Querétaro obtuvo un 2.1, en promedio, de satisfacción entre estudiantes de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).
La Federación de Estudiantes Universitario de Querétaro (FEUQ) aplicó una encuesta a 500 estudiantes, de distintos campus y municipios del estado, expuso el presidente de esa federación, Andrés Cuapio Reséndiz, para preguntar cómo evaluaban el sistema.
El estudio arrojó que el 60 por ciento utiliza el transporte público colectivo “más de 2 o 3 veces al día”.
Otra de las preguntas, detalló el presidente de la FEUQ, consistió en calificar diversos aspectos del sistema entre 1 y 5 puntos, en la que 1 representa el mayor nivel de insatisfacción y 5 el mayor nivel de satisfacción.
Los resultados, en promedio, de las 500 personas estudiantes encuestadas, fueron los siguientes, según Cuapio Reséndiz:
- Comodidad de los asientos y paradas: 2.17.
- Puntualidad de la ruta: 1.92.
- Información clara sobre rutas y horarios: 1.97.
- Seguridad en la unidades o paradas: 2.28.
- Mantenimiento de los vehículos: 2.18.
- Trato y manejo de los conductores en las unidades: 1.5.
- Accesibilidad para personas con movilidad reducida: 1.94.
- Calificación general: 2.1.
“En general las calificaciones son bajas al sistema de transporte que tenemos hoy en día”, comentó el presidente de la Federación de Estudiantes de la UAQ.
Otro aspecto que evaluaron en la encuesta, del 1 al 10, fue la satisfacción con los traslados en el transporte público colectivo (1 representa la menor satisfacción y 10 la mayor).
El 64.8 por ciento de las personas estudiantes encuestadas calificó los traslados de 1 a 5; el 26.6 por ciento de 6 a 7; y solo el 8.1 por ciento le dio un calificación de 8 a 10.
“Yo creo que esos compañeros no usan el transporte público”, apuntó sobre ese 8.1 por ciento, el dirigente estudiantil.
También destaca que casi una tercera parte de la población estudiantil participante en el estudio (29.3%), respondió que sus traslados en transporte público colectivo tardan de 2 a 3 horas.
“Eso es muy impactante”, expresó Andrés Cuapio Reséndiz.
El 43.6 por ciento dijo que sus traslados tardaban 1 hora y el 21 por ciento contestó que de 30 a 45 minutos.
En cuanto a los alcances del programa de la tarifa preferencial y la tarjeta de prepago, el 10 por ciento de estudiantes en la encuesta dijo que no cuenta con tarjeta; el 39 por ciento dijo que paga en efectivo; el 22.8 utiliza la tarjeta de prepago; y el 28.1 contestó que tiene el beneficio de la “tarifa Unidos”, de 2 pesos el primer viaje.
“La tarifa preferencial unidos, que es la que debería llegar a la comunidad estudiantil para que únicamente pague dos pesos, solo la tiene el 28.1 de la comunidad universitaria, esto quiere decir que este programa únicamente le llega a 2 de cada 10 estudiantes en la universidad pública, cuando debería ser el programa para que todos accedieran a esta tarifa preferencial”, expuso el dirigente estudiantil.
Los resultados de la encuesta fueron presentados en el foro de transporte público “10 años de RedQ-Qrobús”.
Ahí, el titular de la Agencia de Movilidad, Gerardo Cuanalo Santos, explicó que uno de los factores externos que ha impactado al sistema de transporte público es la obra “Paseo 5 de Febrero”, pero prevé que la conclusión de la obra se empate con las acciones que han implementado y se sume a la llegada de nuevas unidades, “para generar mayor movilidad” dentro de la ciudad y dentro del sistema.
Cuanalo Santos reconoció que no han podido recuperar la cantidad de personas usuarias del transporte público colectivo que había antes de la pandemia.
“Antes de la pandemia el sistema de transporte público de Querétaro movía a 15.7 millones de usuarios de manera mensual, en la pandemia bajó hasta 4.2, hoy tenemos 8 millones de usuarios, o sea, la mitad de antes de la pandemia, y no los logramos en este momento recuperar esos pasajes”.
La cantidad de ascensos de las personas usuarias tienen un impacto en los ingresos del sistema, apuntó el director Cuanalo Santos.
El director de la Agencia de Movilidad también expuso 13 puntos en los que se han enfocado con la intención de mejorar el servicio de transporte público, con una nueva visión que en lugar de beneficiar al concesionario, como era antes, beneficie a las personas usuarias, según dijo.
- 1.- La creación de un fideicomiso para administrar con orden y control, los ingresos.
- 2.- La adecuación del marco jurídico en materia de movilidad.
- 3.- El control del recaudo.
- 4.- La implementación del programa de “estandarización de frecuencias” en 6 de 9 zonas de la zona metropolitana de la ciudad, con la finalidad de reducir el tiempo de paso de las unidades.
- 5.- La creación de un sistema troncal, complementario y local con la utilización de diferentes tipos de unidades, entre las que están las camionetas tipo Crafter.
- 6.- La señalización de espacios preferentes.
- 7.- La implementación del programa de mujeres operadoras.
- 8.- El establecimiento de paradas oficiales.
- 9.- La creación de una aplicación universal de Qrobús.
- 10.- La creación de un “modelo de satisfacción” para las personas usuarias.
- 11.- La implementación del programa para incentivar el uso de la tarjeta de prepago, con la entrega de tarjetas “gratuitas”.
- 12.- Socializadores que brindan información y hacen recargas a las tarjetas de prepago.
- 13.- La elaboración de un plan de mejora de la infraestructura del transporte público.
“Hoy tenemos las bases para poder construir un sistema de transporte público que vaya acorde a las necesidades de la ciudad, del crecimiento de la ciudad y sobre todo que nos permita en un futuro, integrar nuevos esquemas de movilidad y por supuesto integrar el sistema suburbano de transporte al sistema urbano con compatibilidad de tarifas y por supuesto con compatibilidad de trayectos”.
La rectora de la Universidad, Margarita Teresa de Jesús García Gasca, consideró que aún hay retos.
“Sé que se está trabajando, que hay una nueva estrategia y que eso nos va a permitir ver cambios”, expresó.
En el foro, también participaron especialistas como Lorena Suárez Álvarez, que señalaron, entre otras cosas, la necesidad de aplicar al sistema de transporte una perspectiva del “cuidado” y de género, para mujeres que viajan solas o con sus hijas e hijos; para personas adultas mayores; para personas con alguna discapacidad o para personas que tienen dificultad para moverse (usan silla de ruedas o muletas, por ejemplo).
Otra de las ponentes, la arquitecta Elizabeth Durán Ruiz, consideró que la problemática del transporte es político y que el servicio no se ha enfocado en atender las zonas con mayor crecimiento en la zona metropolitana.
Como lo comentó el dirigente de la FEUQ, en cuanto a que el transporte público “no solo está en la zona metropolitana”, sino en los 18 municipios del estado, otro especialista, Víctor Alvarado, invitó a considerar la problemática del transporte a nivel estatal, no solo en la ciudad capital o en la zona metropolitana, pues hay localidades de municipios donde, dijo, el servicio se limita a dos veces al día.
También invito a mirar desde el enfoque de “sistemas” para identificar aspectos externos o internos que afectan al transporte público colectivo, mismos que no se resuelven solo con el cambio de autoridades o de gobiernos.
También participó un exoperador del transporte colectivo, José de Jesús Rico, que entre sus comentarios, cuestionó la adquisición, realizada el sexenio anterior, de unidades para el sistema Qrobús.
“Resulta que cuando empezaron a descomponerse los camiones, pues ahí se quedaron porque refacciones no tenían, es increíble que hayan hecho la adquisición de tanta cantidad de camiones y no previendo que hubiera refacciones para cuando una unidad no sirviera o se descompusiera, pues en chinga se pusiera a trabajar”, expresó.
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