Después de que la presidenta de México aseguró que todas las mujeres habían llegado al poder con ella y que “todas las mujeres mexicanas somos parte de la Presidencia de la República”, la saxofonista María Elena Ríos Ortiz reclamó que las mujeres, al menos en Oaxaca, de donde es originaria, no tienen justicia.
Iván Aldama Garnica
La saxofonista María Elena Ríos Ortiz, sobreviviente a un ataque con ácido, realizó una protesta en un acto encabezado por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
Su caso es considerado como intento o tentativa de feminicidio, incluso derivó en que varias entidades del país tipificaran los ataques con ácido como delito.
Sin embargo, el presunto autor intelectual de la agresión fue absuelto, el político oaxaqueño Juan Antonio Vera Carrizal, que formó parte del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Aunque una jueza ordenó que Vera Carrizal regresara a la cárcel, la saxofonista acusa que está libre.
En su discurso, del pasado viernes 24 de enero, en San Pablo Villa de Mitla, Oaxaca, con motivo de la inauguración de una carretera, la presidenta Sheinbaum Pardo dio cuenta de la importancia de que una mujer haya llegado a ese cargo público y político, el más relevante en el país:
“… al llegar una mujer a la Presidencia de la República, por primera vez, pues no solamente es que haya llegado una mujer, sino que llegamos todas las mujeres, todas las mujeres mexicanas somos parte de la Presidencia de la República”, aseguró.
“¡Sí se pudo!, ¡Sí se pudo!, ¡Sí se pudo!, ¡Sí se pudo!”, celebraron mujeres asistentes al acto.
Sin embargo, al final de su discurso, la saxofonista intervino para manifestar que, al menos en Oaxaca, de donde es originaria, no es tiempo de mujeres y que tampoco hay justicia para ellas.
Ríos Ortiz ha acusado que el gobierno de Oaxaca, que encabeza Salomón Jara Cruz, de Morena, protege a Juan Antonio Vera Carrizal, presunto autor intelectual de su agresión con ácido.
Días antes de la protesta, la saxofonista reclamó que Vera Carrizal haya salido de prisión, bajo el argumento de que necesitaba recibir atención médica por “hemorroides y depresión”, siendo que, según expuso, a las personas que están acusadas del delito de feminicidio en grado de tentativa, no puede permitírseles la excarcelación para ser tratadas por esos padecimientos.
No obstante, María Elena Ríos Ortiz señaló que Vera Carrizal ya no está internado en un hospital, sino que está libre.
“Presidenta, presidenta, soy María Elena Ríos Ortiz, ¿me recuerda?”, dijo la mujer que pudo subir al templete y llegar al atril.
Parte del público comenzó a abuchearla.
“Sí, el día de hoy, y esto es todo lo que ha hecho el Estado en campañas para difamarme, el día de hoy presidenta, porque acá vienen nada más los porros del gobernador, el día de hoy presidenta quiero decirle que me rindo, me rindo gobernador, usted y Juan Antonio Vera Carrizal ganan, Juan Antonio Vera Carrizal no está en el hospital, me rindo, ganó el gobernador y el día de hoy quiero decirle presidenta que las mujeres en Oaxaca no tenemos justicia”.
Ante las expresiones de descontento de una parte de las personas asistentes, la saxofonista expresó: “Y no les voy a hacer caso porque ustedes son porros de Salomón Jara (el gobernador de Oaxaca)”.
La presidenta se acercó a donde estaba Ríos Ortiz y le dijo algo, según se puede apreciar en la transmisión del acto.
Posteriormente la saxofonista, con ayuda de otra mujer, extendió una manta y la presidenta regresó a su lugar en el presídium.
“… en Oaxaca NO es tiempo de mujeres. BIENVENIDA PRESIDENTA”, fue parte del mensaje escrito en la pieza de tela.
Desde la multitud hacían rechiflas y comenzaron a gritar “¡Presidenta!, ¡Presidenta!, ¡Presidenta!”.
La saxofonista regresó a donde estaba Sheinbaum Pardo, la tocó con su mano izquierda y le dijo algo. La presidenta asentó con la cabeza.
La mujer se retiró del templete y la cámara captó a la mandataria con una sonrisa.
Los gritos de “¡Presidenta!” se intensificaron.
A través del sonido local indicaron que lo que seguía era el corte del listón inaugural de la carretera.
Una parte del público también coreó “¡Gobernador!, ¡Gobernador!, ¡Gobernador!”.
En diciembre pasado fue difundido un video con el que señalaron a la saxofonista de agredir físicamente a otra mujer.
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